*

Es un fastidio, pero la solución consiste en saber que solo nos ocurren cosas buenas si somos buenos. ¿Buenos? Mas bien quería decir honestos. No me refiero a la honestidad en cuanto a las leyes (podría robar una tumba, hasta le arrancaría los ojos a un muerto si creyese que así me alegraría un día), sino a ser honesto con uno mismo.

Desayuno en Tiffany’s.
Truman Capote.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

¡Dejame tu comentario!