*

Aquello que encanta también guía y protege. Apasionadamente obsesionados por cualquier cosa que amemos (barcos de vela, aviones, ideas), una avalancha de magia allana el camino hacia el frente, nivela reglas, razona, disiente, nos arrastra por encima de los abismos, los miedos, las dudas. Sin el poder de ese amor, somos barcas varadas en mares de aburrimiento, y éstos resultan mortíferos.

El puente hacia el infinito.
Richard Bach.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

¡Dejame tu comentario!