*

No son los libros lo que usted necesita, sino algunas de las cosas que hubo en los libros. Lo mismo podría verse hoy en las «salas». Radios y televisores podrían proyectar los mismo infinitos detalles y el mismo conocimiento, pero no. No, no, no son libros lo que usted busca. Puede encontrarlo en muchas otras cosas: viejos discos de fonógrafo, viejas películas y viejos amigos; búsquelo en la naturaleza, y en su propio interior. Los libros eran sólo un receptáculo donde guardábamos algo que temíamos olvidar. No hay nada de mágico en ellos, de ningún modo. La magia reside solamente en aquello que los libros dicen; en cómo cosen los harapos del universo para darnos una nueva vestidura. Por supuesto, no conoce usted esta cosas, no sabe de qué hablo. Pero usted tiene intuitivamente razón. Eso es lo que cuenta.

Fahrenheit 451.
Ray Bradbury.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

¡Dejame tu comentario!